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Mi historia
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Mi nombre es Patricia, sufro de ansiedad generalizada desde mi adolescencia,, cuando llegué a los 20 se empezó a agravar con ataques de pánico, fobias, psicosomatizaciones… mi médico de cabecera me derivó a un psiquiatra el cual me diagnosticó TOC, pero ya llevaba viendo psicólogos desde los 17 años debido al laberinto mental en el que estaba metida que me incapacitaba cada vez más hasta el punto de no salir de la cama, ni comer, ni dormir, sin poder parar de pensar en mis miedos irracionales pero que me aterraban y me hacían creer que era inútil, y creía que podía morir en cualquier momento. Los pensamientos negativos han sido mi cruz gran parte de mi vida, y han hecho de mi vida un infierno, y por tanto también me causa problemas para relacionarme. He adquirido una gran madurez por mis vivencias debido a mi trastorno y a mi difícil y dura historia familiar. He tenido ideas de suicidio en numerosas ocasiones, o pensamientos de los que yo misma sentía pánico. A día de hoy veo a un psiquiatra el cual me puso una medicación hace meses, sin ella no podría haber salido de mi cama ni al mundo de nuevo, aun me aíslo, pero al menos puedo enfrentar el relacionarme en la calle como puedo, pero no sufro el pánico de antes. Tengo problemas para concentrarme, y esto me preocupa por mis estudios. Sonrío cada día a pesar del infierno en el que vivo debido a mi defectuosa mente por decirlo de alguna manera. Siento que tengo gran potencial pero no puedo llevar una vida plena porque la ansiedad me obstaculiza. Lo más duro quizás para mí haya sido el oír: «no quieres salir de esto», «siempre estás igual», es decir, la incomprensión por parte de la sociedad quizás por ignorancia, o por no saber como ayudar a la persona que padece ansiedad. No creo que tenga cura, sólo hay herramientas que te ayudan a reducir los síntomas para vivir tu vida de forma tranquila y en paz, enfrentando a tus pensamientos, que vienen a tu mente aunque no quieras. He sentido culpabilidad toda mi vida porque actuaba raro, o pensaba raro, sin entender que me pasaba, ahora sé que no estoy loca y que una enfermedad o trastorno llegó a mi vida, pero ni yo la elegí ni soy culpable de padecerla. Siempre he ido a psicólogos con la esperanza y la fe de que me ayudarían a salir de ahí, pero siempre recaía fuertemente.
El arte ha sido y es mi salvación,, a través de él expreso todo lo que llevo dentro. Hay días que pienso: pronto estaré bien, me intento animar a mí misma y empujarme para ponerme en pie, pero la ansiedad me ataca una y otra vez, y es complejo para la gente que me quiere porque no me entienden, y es que la verdad es que ni yo misma me entiendo.Ojo, el TAG no se trata igual que el TOC
Hay que entender bien hasta que punto es TAG y no es TOC. Sobre todo la diferencia esta en la claridad del patrón compulsivo y de evitación actual, y de como se desarrolla tu dia desde que te levantas hasta que te acuestas en terminos de ansiedad.Es un error capital lanzar teorías antes de poseer datos. Por naturaleza uno comienza a alterar los hechos para encajarlos en las teorías, en lugar encajar las teorías con los hechos. Sir Arthur Conan Doyle
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