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El paso de los días eternos
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Buenas a todas la comunidad. De nuevo y una vez más me conecto para exponer determinados acontecimientos que han ido surgiendo durante el largo paso de los días.
Hace relativamente poco, decidieron subirme el Anafranil (Clomipramina) hasta los 125mg. diarios. Los motivos con los que mi psiquiatra lo argumentaba, es que era una de las formas con las que podría estar más atento para con mis estudios y en el día a día. Bien es cierto que las obsesiones cada vez me están afectando más al ámbito anímico, pues como sabréis cambien en su forma y grado. Debo admitir con total sinceridad que no existe un momento en el día, por muy distraído que quiera estar, en el que no existan ningún tipo de obsesión con su compulsión asociada. Soy tan rumiador que obviamente mis compulsiones son completamente abstractas, idealizadas, excesivamente trasparentes en el espectro de la realidad. Así pues trazo líneas mentales en un cuarto determinado las cuales no puedo «mirar» o bien repaso mentalmente conceptos relacionados con los estudios como si de un continuo rezar se tratase. Al margen debo aclarar que efectivamente tengo una parte disociada de mi personalidad, que es ajena a mi persona, generada por lo que comenté en el post «uno más». Esta parte salta a mi espacio presente en forma de obsesiones, muy similarmente y guardando relación con hechos que desterré de mi, pues me negaba taxativamente (y me niego) a aceptarlos. Aparecen contextos determinados en forma de imágenes, individuos, frases, palabras, fonemas y una larga cadena que se junta con mis obsesiones anteriormente descritas. En los últimos días he estado tan hiperatento que he llegado a tener ilusiones sobre el «oír mi nombre cuando paseaba por la calle». He de destacar que a diferencia de las ilusiones, las alucinaciones no deben tener un estímulo externo, siendo el primero de los casos el mío. Por otro lado y volviendo a la disociación emocional y cognitiva (aunque menor en este segundo aspecto) debo destacar que dado que hay distintas partes en mi persona que no se han agrupado a la totalidad es muy probable que ciertas obsesiones, hablando de un modo racional, también deba aceptarlas sin más. Aceptación que no radica únicamente en este espectro, sino inclusive en el de mi propia persona, pues jamás me he sentido a gusto conmigo mismo ni me he querido. He sido y sigo siendo alguien que no le importa dar absolutamente nada a cambio a los demás pero que por desgracia nunca soy egoísta conmigo mismo. Así de esta manera compañeros los días pasan demasiado rápido, pero dolorosamente despacio para mí.
BergerDíselo al médico, igual te cambia esa medicación si está teniendo un efecto indeseado.
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